Melania Trump está en boca de todos, ya sea por sus estilismos, sus desaires conyugales o, como hasta ahora, por aparecer un tanto distinta a lo que la gente la recuerda. De hecho, tan distinta ha aparecido en los últimos días que son muchos los que sospechan que no se trata de ella, sino de una doble que acude en su lugar a algunos actos públicos. Una teoría que circula en las redes sociales a modo de rumor que está cobrando cada vez más fuerza y que ha dado lugar incluso a una oleada de memes que ponen de relieve que la mujer que acompaña al presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, a algunos actos no es la primera dama, pese a que se le parezca.
Siempre se ha especulado con la posibilidad de que los líderes mundiales cuenten con clones en nómina para realizar tareas de representación o apariciones públicas tediosas que les impiden realizar otras más relevantes para sus funciones. Sin embargo, esta rumorología ha dado un paso más y ahora se plantea la posibilidad de que incluso esta tendencia jamás confirmada haya llegado también a la primera dama estadounidense, que cuenta con una joven de agraciados rasgos que se asemejan tanto a los suyos que incluso podría pasar por ella para la mayoría.
Para la mayoría, pero no para el tuitero Joe Vargas, que ha sembrado la duda a través de un tuit en el que incluye un vídeo de la BBC que ha desatado la polémica y está siendo motivo de debate entre los usuarios de las redes sociales. “Esta no es Melania. Pensar que ellos podrían llegar tan lejos e intentar hacernos pensar que está ahora en televisión es alucinante. Esto me hace preguntarme qué más es mentira”, lanzaba este usuario, abriendo la veda a una oleada de tuits a favor y en contra de esta versión, que está dando mucho juego.
Tanto éxito ha tenido este mensaje en Twitter que ya se ha creado un movimiento bajo el hashtag #FakeMelania. Aquí, los usuarios subrayan que la estructura ósea de su nariz no es igual que la de la auténtica Melania Trump, ya que la supuesta impostora tiene el puente más ancho. También el pelo ha sido motivo de especulaciones, destacando que en esta ocasión lucía “más seco y dañado” que de costumbre o que se trataba directamente de una peluca. Los que se muestran en contra de esta polémica subrayan que la calidad de la imagen no es buena y que las gafas que llevaba cuentan con un reborde que hace pensar que su nariz es más voluminosa, pero que realmente se trata de la verdadera primera dama.
¿Es Melania Trump o es su clon? ¿Qué opináis?
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