Este fin de semana se celebrará la gran boda. Tamara Falcó e Íñigo Onieva se darán el '¡Sí, quiero!' este sábado 8 de julio y aunque esta boda está teniendo bastantes percances, los novios están muy emocionados por cumplir su sueño. La boda está en el punto de mira por muchos motivos. Nada más saberse que la marquesa y el empresario se habían comprometido, salió a la luz el vídeo de él siéndole infiel con otra chica en el festival 'Burning Man'. Tras romper y volver, ella se quedó sin vestido de novia, y lo último que hemos sabido es que habrían robado las joyas de la boda de Tamara, valoradas en 2 millones de euros. La realidad supera a la ficción, y es que también se ha podido saber que Íñigo Onieva casi sufre otro robo en pleno centro de Madrid.
A pesar de estos contratiempos, la pareja se mantiene fuerte y unida. Son muchos los preparativos que genera una boda, y esta parece que más pero la marquesa solo le importa una en concreto: su vestido. Tamara Falcó está encantada con su vestido de novia. El proceso de creación ha sido fabuloso y no puede estar más orgullosa de haber elegido a ese equipo. Hace unos días, Tamara estuvo con su madre en Nueva York para una prueba y para los últimos retoques viajará a España West Gordon, el diseñador con parte de su equipo. Exactamente, el vestido de la Marquesa de Griñón llegará a sus manos este miércoles 5 de julio.
La boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva se celebrará este sábado 8 de julio a las 19:00 horas en una iglesia del centro de Madrid oficiada por el padre Cruz. Tras la ceremonia religiosa, todos se dirigirán a la Finca El Rincón para disfrutar de una fiesta inolvidable.
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